
Habilidades de Resiliencia
Tendemos a idealizar la infancia como un momento del desarrollo en el que carecemos de preocupaciones. Sin embargo, esta etapa no protege contra las heridas emocionales y los traumas que muchos niños suelen experimentar, y que pueden venir derivados de una amplia variedad de problemas como, por ejemplo, la adaptación a un nuevo colegio, el acoso por parte de los compañeros de clase o sufrir abusos en el hogar. La capacidad de desarrollarse a pesar de los desafíos surge de las habilidades de resiliencia.
Con esta introducción, comienza la “Guía de resiliencia para padres y profesores”, un artículo publicado por la APA (Asociación Americana de Psicología-American Psychologycal Association) en su página Web, a través del cual ofrece una serie de recomendaciones dirigidas tanto a padres como a profesores, con el fin de ayudar a niños y adolescentes a desarrollar su resiliencia (entendida como la capacidad para hacer frente de forma eficaz a la adversidad, al trauma, a las amenazas o a fuentes estresantes).
Tal y como indica la APA, si bien el dolor emocional y la tristeza son sentimientos que suelen experimentarse tras sufrir un trauma importante o una pérdida personal (o al enterarnos de la pérdida o trauma de otra persona), es esencial saber hacerles frente y sobreponerse a ellos
- Establecer conexiones sociales
- Ayude a su hijo a ayudar a otros
- Mantenga una rutina diaria
- Hacer pausas
- Enseñe a su hijo a autocuidarse
- Establezca metas
- Cultivar una autoimagen positiva
- Mantener las cosas en perspectiva y una actitud positiva
- Buscar oportunidades para el autodescubrimiento
- Aceptar que el cambio es parte de la vida